domingo, 25 de marzo de 2012

Camelot Warriors


Hace unos días, en la página de Pixels Mil, el amigo Toni razonaba sobre el significado de los términos "hardcore" y "casual player" que tan de moda están, con el objetivo de intentar definirse como jugador y saber a cuál de estos grupos pertenece. Entre los comentarios, una de las cuestiones que se trató fue la dificultad de algunos juegos antiguos y entre algunos ejemplos conocidos, salió el nombre de Camelot Warriors. 

Precisamente por ser un juego que me trae buenos recuerdos y le dediqué tantas horas que llegué a acabarlo, a pesar de su gran dificultad, se me había ocurrido echar una partida de nuevo y comprobar si me sigue divirtiendo.

Para empezar, lo mejor será situarlo en el tiempo. Durante la década de los '80, España llegó a ser el segundo productor europeo de videojuegos, solamente por detrás del Reino Unido. Una de las empresas españolas más importantes de aquella época era Dinamic, que en el año 1986 publicó Camelot Warriors para los ordenadores Spectrum, Amstrad CPC, MSX y Commodore 64, convirtiéndose en un éxito y con el tiempo, pasando a ser considerado un clásico, entre los jugadores que lo disfrutaron en alguno de estos sistemas. Desconozco las diferencias entre las distintas versiones al detalle, ya que solamente lo he jugado en MSX, así que voy a hablar de mis impresiones en este ordenador. 

Así empieza el juego y cuando baja ese buho, si no le atizamos nos matará.

Por si alguien no conoce Camelot Warriors, se trata de un título de plataformas por pantallas en el que manejamos a un caballero medieval, ataviado con una espada. Nuestro objetivo es conseguir los cuatro objetos de otra época repartidos a lo largo de la aventura. Para ello, tendremos que evitar tocar a los seres que pueblan este mundo, pues un leve contacto significa la muerte inmediata, restándonos así una de las nueve vidas con las que empezamos el juego, para volver a aparecer desde el punto en el que hemos entrado en la pantalla. La forma de hacerlo será saltando por encima de ellos o bien matándolos con la espada.  El problema con el arma radica en que solamente alcanza la media altura; teniendo en cuenta que nuestro personaje no puede agacharse ni atacar en el aire, nos veremos obligados a esquivar los enemigos que estén fuera de su radio de acción.

Una vez conseguido "el fuego que no quema", tenemos que dirigirnos hacia el brujo.

Como decía, nuestro personaje no tiene apenas movilidad y solamente puede caminar hacia la izquierda o derecha. Si pulsamos la dirección hacia arriba, el caballero dará un salto en diagonal con una intensidad y dirección uniforme que no podemos variar. Así pues, aquí no se puede modificar la trayectoria del personaje ni la potencia del impulso. Como en muchos otros juegos de plataformas anteriores, nuestra habilidad no depende de los reflejos, sino del cálculo mental correcto de la trayectoria del caballero para evitar ser tocados por los enemigos.

Aunque se trata de una mecánica arcaica, no deja de tener su atractivo incluso en la actualidad, al menos para mi gusto, pero encuentro un problema en la pobre ejecución técnica de los movimientos. Por de pronto, son tan lentos que resultan tediosos y difíciles de calcular. La forma de caminar del caballero y el salto encorsetado, limitan mucho el dinamismo del juego. La parsimonia y la poca naturalidad con que se mueve, sobre todo en el aire, es el verdadero motivo de la dificultad famosa de Camelot Warriors. Así pues, en este caso, el juego no supone un reto por su diseño inteligente, sino por lo complicado que resulta acertar con el momento y el lugar adecuados para realizar los saltos.

Solamente podremos acceder al fondo marino convertidos en rana.

Por si esto fuera poco, hay algunos detalles más que no me gustan. Por ejemplo, hereda de otros juegos del género el problema de entrar en un bucle de muertes inevitables; al acceder a una pantalla saltando o cayendo desde la anterior, en caso de morirnos, volvemos a aparecer de la misma forma que entramos, de manera que si hemos entrado con un salto que nos lleva a tocar un objeto mortal, perderemos todas las vidas siguientes del mismo modo.

Veo otro gran fallo, en este caso con el diseño de los escenarios. Para poder salir de cada mundo, tenemos que coger el objeto pertinente. El problema es que no podemos volver atrás en algunas pantallas, de manera que si escogemos el camino que nos lleva a la salida sin haber recorrido antes el que va hasta el objeto, nos quedaremos bloqueados sin poder avanzar ni volver.

"El elixir de la vida" está casi a nuestro alcance.

¿Por qué un título así se ha convertido en un clásico de los videojuegos? Encuentro varias explicaciones. Una de ellas es que a pesar de todo, es un juego bastante divertido. Hay que tener en cuenta que fuera de España seguramente no estuviera tan bien considerado, pero aquí nos llegaban muchos juegos de otras empresas del país que eran bastante más simples. Por aquel entonces, con esos gráficos tan vistosos, sobre todo con esos mapas de bits tan grandes, es normal que Camelot Warriors nos llamara especialmente la atención.

Nunca he sabido si era un cocodrilo o una rata.

He estado jugándolo durante unas horas y me ha entretenido, pero lo encuentro muy limitado, pues no se basa en el aprendizaje de su mecánica o en la habilidad del jugador con los mandos, sino en la memorización de cada uno de los saltos. Por cierto, una vez aprendidas todas las pantallas, calculo que se puede acabar en unos veinte minutos, aproximadamente. Quizá nos pareciera un buen juego hace 25 años y no niego que lo sea, pero con la perspectiva del tiempo, si lo comparamos con otros títulos de aquella época, no me parece que esté a la altura de los mejores, o al menos no ha envejecido tan bien.

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19 comentarios:

  1. Por cierto, no lo he comentado, pero la colisión de los sprites es horrible. Hay un cuadro de píxeles invisibles alrededor del muñeco y en ocasiones hace que te maten sin haberte tocado.

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  2. Yo lo recuerdo con bastante cariño, en gran parte porque me marcó durante mi niñez.
    Junto con el Rampage, los Phantomas y algún otro, Camelot Warriors era un imprescindible de mi colección.
    Habían juegos mejores, en efecto, pero este tenía algo especial que siempre me picaba a volver una y otra vez.
    Me sigue pareciendo bastante difícil por cierto.

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    1. Reconozco que he sido un poco duro con la nota, pero siendo benevolente le hubiera dado como mucho un 7. Es un buen juego, pero parte de su encanto se ha perdido con el tiempo. El juego es difícil, pero como verás por mis capturas, solamente es cuestión de paciencia y memorización. :D

      Ya que nombras Phantomas, también me gustaban los dos juegos, pero tendría que volver a jugarlos porque hace mucho que no lo hago.

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  3. Yo tuve un msx pero no recuerdo este juego, el otro día (a pesar de que conservo mi msx 2 nuevo ) me bajé el emulador para jugar al Q*Bert de Konami así que luego buscaré este juego y lo pruebo un rato para ver si el control es tan tosco como cuentas....y luego vuelvo a jugar al Q*Bert :)

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    1. Sucede en muchos juegos españoles que tienen gráficos muy vistosos, pero poco dinámicos (tiene guasa la cosa viniendo de una empresa llamada Dinamic). Un juego en el que la dificultad está basada en el movimiento del protagonista no puede envejecer bien. Aún así, reitero que es divertido, siempre y cuando tengas la paciencia necesaria.

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  4. Este le tenia mi primo. Yo era muy pequeño (no se si tenia cuatro o cinco años) así que no jugue en su día con el. Pero recuerdo que me pasaba las tardes viendole jugar durante mucho rato. Lo unico es que estos juegos de la Spectrum pedian una paciencia a prueba de bombas.

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    1. Pedían mucha paciencia, pero ten en cuenta que antes los juegos eran caros y teníamos pocos. Eso significa que le dedicábamos un montón de horas a todos. Parte de la gracia de Camelot Warriors, igual que con otros juegos de plataformas de aquella época, estaba en ser capaz de llegar un poquito más lejos para descubrir nuevas pantallas y no solamente por la satisfacción de superarlas, sino para disfrutar de su calidad gráfica.

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  5. Nunca le jugue pero admito que todos estos juegos me llaman poderosamente la atención a pesar de su exagerada dificultad.

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    1. Siempre puedes echar una partidita de prueba con un emulador y así verás de qué va la cosa, aunque en el género de las plataformas hay otros de esa generación que considero mejores, la verdad.

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  6. Juego vistoso pero difícil y no muy jugable. La gente coincidirá conmigo en que los juegos de Dinamic que mejor han envejecido son aquellos que tenían una dificultad razonable como No Named, Phantis o Freddy Hardest (el primero)

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    1. Efectivamente, como comentaba en el artículo, creo que una de las claves de su éxito estaba en que sus gráficos eran vistosos. De todas formas, lo de la gran dificultad es relativo: Al no basarse en los reflejos del jugador, solamente hay que tener la paciencia necesaria de aprender cada uno de los saltos. Hasta la persona más torpe es capaz de pasarse el juego si tiene la paciencia suficiente de aprendérselos. El problema es que necesitas muchas horas para eso y una mecánica tan anticuada resulta poco apetecible hoy en día. Como dices, otros juegos de Dinamic han envejecido mejor que este.

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  7. Este era de los que te hartabas de su dificultad, y a golpe de poke te hacías con él. :D

    Debe ser de lo más jodido junto a Abu Simbel y Ramón Rodriguez.

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    1. ¡Qué típico lo de los "pokes"! Para el que no conozca la palabra, aclaro que eran pequeños programas que se hacían para conseguir vidas o invulnerabilidad en los juegos. En revistas como Micromanía solían poner estos trucos para algunos juegos más conocidos.

      De todas formas, yo no solía usar trucos en aquella época. Alguna vez probaba algunos, pero cuando tenía el juego muy quemado y aburrido.

      Ya que nombras el Abu Simbel, era aún más cabrón que este. Ese juego usaba muchas trampas que te llevaban al típico bucle de muertes que comentaba en el artículo. Siempre me ha parecido poco divertido, usado como recurso para aumentar la dificultad.

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  8. Me hacéis sentir como el crío que soy cuando habláis de juegos tan añejos =( Yo creo que no hubiera tenido paciencia para este juego, sobretodo por ese control tan tosco que comentas, aún así me gustaría probarlo algún día junto a otros de la misma época que no he tenido la oportunidad de probar...

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    1. Posiblemente te sería complicado disfrutar de Camelot Warriors. Es un juego que en su época llamaba la atención, pero hay otros que con el tiempo han demostrado seguir siendo divertidos, mientras que a este se le pueden achacar los problemas que he enumerado y que desde la perspectiva actual resultan más difíciles de perdonar.

      De todas formas, yo te recomiendo que algún día cojas un emulador y pruebes algunos de los juegos que se consideran clásicos de los años '80. Hay muchos que siguen siendo excelentes, como casi todos los de Konami, por ejemplo. Seguro que en el futuro analizo alguno de esos por aquí.

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  9. A este le llegué al final, uno de los pocos. El primer y segundo nivel me los paso casi con los ojos cerrados, el tercero ya me cuesta bastante mas.

    La versión de C64 es muy buena, tiene una música muy muy linda, muy medieval!!!

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    1. He estado viendo videos de la versión de Commodore 64 y es mucho mejor que el original de Spectrum y el de MSX, que era una adaptación de este. Veo que cambian algunos enemigos y técnicamente no tienen nada que ver. Desde luego, mejora mucho en Commodore.

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  10. Gracias por la mención y me alegra que aquella charla desencadenara el revivir este clásico :D Muchas veces la dificultad de los juegos iba ligada a las limitaciones técnicas que afectaban a la jugabilidad. Aún así este Camelot Warriors se ha convertido en un clásico. Seguramente ya conozcas el remake del 2007 con la jugabilidad del original pero con los gráficos remozados (muy remozados!). Ahora que me había animado no me funciona no se porqué (lo mismo no es compatible con win7).

    http://computeremuzone.com/ficha.php?id=712

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    1. Conocía esta versión pero nunca la he jugado. Me la voy a descargar para ver las diferencias (aparte de las gráficas, claro).

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