lunes, 24 de octubre de 2011

¿Nos aclaramos con nuestros gustos?


¿No os habéis parado nunca a pensar en cuales son vuestros gustos con los videojuegos? Seguro que pensáis que después de tantos años en esto lo tenéis clarísimo. Aún así, insisto en la pregunta. A pesar de que creáis saberlo bien, os propongo un ejercicio de análisis sobre qué nos gusta y por qué.

Creo que damos por hecho muchas cosas y por eso no nos planteamos esa pregunta, pero daos cuenta de las aparentes contradicciones en las que caemos. Voy a poner varios ejemplos para explicar lo que quiero decir.

En muchas ocasiones se abren debates en los blogs y webs de videojuegos y una de las conclusiones a las que se suele llegar es que actualmente las grandes compañías suelen ser poco innovadoras y siempre sacan lo mismo, una y otra vez. Acabamos renegando de algunas sagas y franquicias conocidas porque estamos hartos de que no inventen nuevas mecánicas y nos ofrezcan siempre la misma historia, con personajes clónicos y los mismos sistemas de juego. En el otro lado de la balanza, ponemos como ejemplo a los desarrolladores independientes que nos ofrecen cosas nuevas, asumen más riesgos e inventan mecánicas y estilos que no habíamos visto hasta ahora.

No me miréis así. Vosotros nos habéis sorprendido con cosas que no conocíamos.

Dicho todo esto, yo me pregunto, ¿por qué nos emocionamos con los juegos que imitan estilos de otra época? Estamos hablando de que queremos cosas nuevas y estamos hartos de que siempre nos den lo mismo... Pero al mismo tiempo pedimos un Sonic como los de Megadrive, o nos interesamos por cualquier arcade que se parezca al Contra. Nos rasgamos las vestiduras porque los juegos de rol ya no son como los de antes. ¡Que hagan otro Baldur's Gate! No queremos aventuras gráficas tridimensionales modernas, no no no. ¡Que sean dibujadas y en 2D! ¡Las mejores son las aventuras clásicas, con sus sprites tan majos!

Pero vamos a ver, ¿no nos aclaramos con nuestros gustos o qué? Visto así, esto parece una contradicción. Pedimos que nos den cosas nunca vistas, pero que no me toquen a Mario. Anuncian un nuevo Zelda y lo deseamos; hay un montón de Zeldas pero da igual, es lo mejor del mundo mundial. Estamos hartos de todos esos juegos que parecen clónicos y son siempre disparar y disparar y disparar, pero ojo, no se te ocurra decir que el Gunstar Heroes es malo. Como comentaba, nos gusta nombrar juegos independientes como ejemplo de modernidad, nuevas ideas y proyectos arriesgados, pero sale un plataformero independiente con sabor añejo como Super Meat Boy o un matamarcianos de los de antes como Hydorah y los ponemos en un altar ¡Qué buenos son!

Esto es un juego divertido, entonces y ahora.

Bueno, vale, aclarémonos ya de una vez. Los ejemplos que he puesto son personales, está claro. A lo mejor a alguien no le valen, pero seguro que compartís algunas de estas ideas que parecen contradictorias, aunque sea con otros títulos.

Voy a dar mis razones para explicar que el gusto por los juegos antiguos y las formas clásicas no tiene por qué estar reñido con modernas tendencias y nuevos estilos: Nos gusta que nos sorprendan, que nos propongan algo distinto, que nos maravillen con cosas nunca vistas y por eso pedimos a los creadores que inventen, que sean capaces de ofrecernos algo nuevo y no acaben siempre repitiendo los mismos clichés. Al mismo tiempo, hay juegos que han marcado época, que son santo y seña dentro de su estilo. Son espejos en los que el resto de juegos deberían mirarse si quieren llegar a esa calidad y diversión. Nunca pasarán de moda, aunque se hayan inventado hace muchos años. Pedimos cosas nuevas, pero nuestros diez mandamientos, nuestras tablas de la ley del mundo de los videojuegos son y serán esos Sonics, Marios, Ghost'n Goblins, Tetris, Flashbacks, Dooms, Street Fighters o Monkey Islands que en su día fueron novedosos y marcaron tendencias. Son los pilares que han sentado una base y nosotros lo sabemos. Por eso nos siguen apeteciendo los juegos que los imitan o sus secuelas.

Póngame dos docenas como este, por favor.

Ahora que lo pienso, podemos concluir en que no hacía falta dar tantas explicaciones. Sencillamente y resumiendo, para los que amamos de verdad los videojuegos, los buenos juegos son intemporales, tanto da si sus mecánicas, gráficos, personajes o argumentos nos resultan familiares, o por el contrario son novedosos. 

¿Por qué no me he ahorrado entonces todo este rollo? Bueno... Es que además de jugarlos también nos gusta hablar de ellos, ¿verdad? ;)

8 comentarios:

  1. A mi es algo que me da mucho por saco, a mi me gustán todos los juegos, los retro, los modernos, los comerciales, los indies... pero a la gente le gusta mas hablar y quejarse que jugar, entre los "hardkore" y los "pseudo" me tienen frito, muy buen artículo.

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  2. @FastETC: Por ahí van los tiros, por ahí. En muchas webs se generan debates de este tipo. Por cierto, lo que no conocía es la expresión "pseudo" y estos días he visto que la habías usado también en el twitter. ¿A qué tipo de gente te refieres exactamente?

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  3. Pues yo creo que soy afortunado porque me gustan casi todos los estilos y épocas, igual juego a un juego con graficos sencillos 2D que a una gran nueva IP que ha costado un montón de pasta, lo importante es que me enganche y que me divierta. Actualmente estoy jugando al Batman A. A. que ya tiene un par de años creo y me parece una pasada de juego y hace poco jugando al limbo con unos graficos 2D y en escala de grises.

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  4. Pues yo tambien soy muy afortunado porque tengo muy claro lo que me gusta. Dame un buen juego de estrategia por turnos y soy feliz.
    ¡Bendito sea Sid Meier y su saga de Civs!

    Despues, cada cierto tiempo, paso una temporada jugando a otro tipo de juegos, solo para darme cuenta de que sigue gustandome lo mismo de siempre.

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  5. Bueno tendré que ser yo el primero en decir que yo prefiero el Nesquick al cola cao y ahora decidme lo que queráis que me resbala xDDDD

    Muy buena la entrada cyber-2 , yo últimamente con el rollo de los blogs y tal hablo con bastante más gente sobre videojuegos y he llegado a la conclusión que los que van de hardcore son los últimos con los que me gusta hablar sobre el hobby, al final son lo más radicales, los más cerrados de mente, y los que menos arriesgan a la hora de jugar a un juego.

    Al hilo de la entrada yo lo que busco en un juego nuevo es que al menos tenga algo novedoso,que me llame la atención, ya no pido que inventen un género, sino una pequeña vuelca de turca que digas vaya esto no me lo esperaba un buen ejemplo de lo que digo es mario galaxy, si durante una temporada no encuentro ningún juego que consiga hacerme sentir eso pues me pongo a jugar a juegos retro ;D

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  6. @Pascual: ¡Ese es el espíritu jugón! ;)

    @Jose V.: Deberían hacer una edición especial del Civilization que saliera tu nombre en vez de Sid Meier, ¡porque mira que eres fan de esa saga, jaja! :P

    @tuxlive: Es que habría que volver a definir qué es ser hardcore, porque esa gente usa la palabra para reivindicarse como auténticos jugones, cuando precisamente lo que hacen es encasillarse en un tipo de juego, sin querer saber nada de otros géneros, épocas o estilos. Eso no es ser un jugón.
    P.D.: Yo no le hago ascos ni al Nesquik ni al Cola Cao. :P

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  7. Cyber hoy he publicado en 99RedPotions el decálogo del buen pseudo, haber si te queda aclarado jeje.

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  8. @FastETC: Jajaja, vale, voy a ver de qué va el asunto. ;)

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