lunes, 4 de febrero de 2013

Más vale tarde que nunca


Se me amontonan los videojuegos. Tengo unos cuantos que ni siquiera he probado y muchos más a los que apenas he dedicado unos minutos. Seguramente es una tontería seguir gastando dinero pero algunas ofertas me parecen irresistibles. Incluso a veces compro para premiar el esfuerzo de los proyectos independientes; no son pocos los juegos que tengo solamente porque quería que sus autores se vieran recompensados. Altruista que es uno, o malgastador, según se mire.

No siempre la falta de tiempo es la razón por la que no juego; en muchas ocasiones no lo hago porque no quiero. Escoger un título en vez de otro depende de las apetencias del momento. Aunque parezca mentira, puede que no tenga ganas de averiguar el motivo por el que a alguien se le ocurrió construir una ciudad en el fondo del mar, con lo mala que es la humedad, o por qué tengo que encarnar a un ninja cabreado en su cruzada contra el crimen. Por esa razón algunos videojuegos se van quedando en el fondo del armario, como esa camisa a la que le coges manía. A medida que pasa el tiempo más pereza me da ponerme con ellos y por alguna razón acabo teniendo la falsa sensación de que no me gustarán. Son una parte de las cuentas pendientes a las que me refería hace unos meses, en un artículo anterior.

Torchlight

Sin embargo, de vez en cuando se me ocurre rescatar del olvido alguno de estos juegos. En realidad sigo teniendo presente que me los compré porque pensaba que valían la pena, así que siempre acabo cogiendo alguno para darle una oportunidad. Esta costumbre solamente sirve a veces para desengañarme por completo y darme cuenta de que nunca lo voy a disfrutar, pero como suelo acertar con mis compras, en muchas ocasiones acabo exclamando: ¿Por qué te tenía abandonado?

Y reiterando lo dicho, no es que me falle el olfato a la hora de comprar, sino que poseo tantos juegos que tengo que descartar algunos, teniendo en cuenta que me gusta revisar mis preferidos una y otra vez, cosa que me quita tiempo para jugar a otros. Eso mismo me ha pasado recientemente, por ejemplo, con Torchlight. Lo tengo desde hace varios meses porque venía incluido en uno de esos Humble Indie Bundle, paquetes que suelo comprar religiosamente cada vez que salen. Probé el juego apenas unos minutos y no me disgustó, pero como en ese momento tenía muchos otros que me apetecían más, ahí se quedó la cosa. Este fin de semana, por un motivo que no sabría decir pues ni siquiera me lo había propuesto, se me ocurrió jugarlo de nuevo. Quizá lo hice para acordarme de hasta donde había progresado, o solamente porque quería jugar a algo y el puntero de mi ratón pasaba por allí, no lo sé. El caso es que lo he cogido con ganas y como me lo estoy pasando bien, dudo que lo vuelva a abandonar tan rápidamente. No siempre se enamora uno de un flechazo.

Más de un buen juego espera su turno en mi biblioteca.

Últimamente me pasan a menudo estas cosas y creedme que descubrir así un buen juego me sienta tan bien como comprar una novedad esperada. Los videojuegos están más baratos que nunca y por eso mi colección crece más deprisa que antes. Cuando mi poder adquisitivo era el de un estudiante, el bolsillo no daba para mucho, así que ningún videojuego se quedaba acumulando polvo. Con las primeras nóminas fue cuando empecé a abusar de las compras. Recuerdo, por ejemplo, el caso de haber adquirido de golpe tres JRPG para Saturn; por la fama de la serie, Shining The Holy Ark fue el que más ganas tenía de jugar y apenas toqué los otros dos; unas semanas después me dio por continuar con Lunar - Silver Star Story - y como me gustó más, abandoné el primero. En cuanto lo acabé me puse con Riglordsaga 2, que finalmente fue mi preferido.

Según el dicho, más vale tarde que nunca. Lo bueno es que los videojuegos no caducan como los yogures, ni se mueren, como los perritos. Como mucho se hacen viejos, unos más y otros menos; algunos se vuelven feos pero a otros incluso les sientan bien las canas, como a Richard Gere. Sin embargo, yo sigo acordándome de ellos y tarde o temprano les llegará el turno. En fin, que me voy a jugar a Torchlight, y luego… Ya veremos.

17 comentarios:

  1. Eso son pasa a todos. Yo mismo tengo juegos de varias plataformas por estrenar. Falta de tiempo digo, pero no es cierto, más bien, falta de motivación para hacerlo. :(

    En fin...

    Si es que apenas dedico algo de tiempo a los mundos virtuales.... ¿ la edad ? Nu sé... :/


    xD

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Cuanto más mayores nos hacemos, más obligaciones tenemos que nos quitan tiempo de ocio.

      Precisamente ayer me comentaba un compañero de trabajo que le gustaba mucho jugar pero que ya no tiene tiempo para hacerlo. Mi respuesta es que hay que poner prioridades con las aficiones; a mí me gusta el fútbol, por ejemplo, pero en vez de irme el domingo al bar a ver el partido, prefiero emplear ese rato con los videojuegos.

      Lo que está claro es que todo no se puede hacer, a no ser que nos toque la lotería y podamos vivir sin currar.

      Eliminar
  2. Buen artículo, como siempre.

    En mi caso, para evitar esa acumulación, que se sale de madre, y por mucho, me he hecho un propósito de 2013: no comprar más de 3 juegos físicos (cuando uno hace mudanzas se entera de lo que cuesta mover las cosas, y no hablo de dinero, precisamente), y pensar muy mucho las ofertas de Steam y otras plataformas digitales (sólo chollazos y sólo si ya iba detrás de ellos desde hace tiempo; no se valen novedades o juegos de los que no había oído hablar).

    De momento de esos 3 juegos en soporte físico ya he gastado uno (Gears of War 3, vicios y guilty pleasures que tiene uno; tenía que cerrar la saga), y en digital me he hecho con algunos Final Fantasy, aprovechando que iba tras ellos y que estaban de "oferta" (curioso término después de conocer Steam) en la Store de Sony.

    Y no es que no los vaya jugando, lo que pasa es que ha llegado un punto en que estoy acumulando demasiados juegos, la lista de espera no baja en absoluto. Lo que también es cierto es que, al menos para mí esos juegos no pierden valor, aunque los juegue meses o incluso años después de adquirirlos.

    Esto es como con otras cosas: aunque en mi caso me esté obligando a echar un poco el freno, según los gustos y criterios de cada uno, adquirimos juegos. Porque sabemos que lo jugaremos, pero el cuándo... no es tan importante.

    ¡Saludos!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Yo también he echado el freno desde hace meses, pero la gran cantidad de juegos que he llegado a acumular supera con creces el tiempo que tengo para jugarlos.

      Estoy haciendo lo mismo que tú: Salvo alguna excepción, compro solamente lo que tenía previsto, aprovechando las ofertas, y si no puedo jugarlo ahora ya lo haré en un futuro. Efectivamente, tampoco le doy tanta importancia al cuándo.

      Eliminar
  3. Yo nunca he tenido mucha cantidad de juegos pendiente, creo que lo máximo a lo que he llegado es 2 en cola debido a que el 99% de mis juegos son de consola que valen una pasta y no tengo por costumbre piratear nada, así que no puedo tener una basta colección porque mi sueldo no me lo permite (y no soy gran amigo de las descargas ni el pc, aunque cada vez voy a más.)

    Pero si que me he visto en situaciones parecidas a la que comentas, tener dos o tres juegos empezar uno, dejar otro en el olvido y al tiempo coger un tercero dejarlo a medias y finalmente rescatar de la estantería el olvidado y que llegue a ser el favorito.

    Me viene a la mente cuando compré (me trajeron los reyes) el Tomb Raider II, Croc y FF VII. El primero que probé por su fama fue el TR II y me pareció un bodrio xD luego puse el FF y no me gustó nada y lo abandoné, luego me puse con el croc que no me disgustó y a los meses retomé el FF y de los tres fue mi favorito.

    De todos modos yo ahora mismo estoy en una situación distinta, estoy viviendo un cambio de gustos demasiado radical creo. Hace una semana vendí mi ps3 por dos razones: la primera porque me parece una mierda y la segunda porque la mayoría de los juegos de la consola no me interesan, esto es algo que jamás habría afirmado en generaciones anteriores, pero es cierto la mayoría de juegos "AAA" actuales me parecen tremendamente aburridos, ultimamente juego más a indies en pc, juegos retro en la Archos y a la Wii U de momento el resto no me interesa, por qué cuento esto? pues porque ahora mismo mi situación es que me estoy deshaciendo de juegos que tenía "pendientes" y me estoy dedicando a pasarme todos los Sonic xD ya voy por el 3.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Para un comprador de juegos de consola en formato físico el asunto es un poco distinto, claro que sí. El precio de los juegos es clave para acumular más o menos.

      Por cierto, solamente has tardado 21 años en jugar los Sonic en serio. A lo mejor cuando te jubiles te da por coger el Half-Life y te parece estupendo. ¿Ves como más vale tarde que nunca? :D

      Eliminar
    2. ¿Sabes lo bueno de jugar a Sonic 21 años después? el poder descubrir nuevas sensaciones cuando crees que ya lo has probado todo, esa es la sensación que tengo ahora mismo, con 30 años he vuelto a tener la misma ilusión que cuando me puse a jugar a Super Mario Bros por primera vez cuando era un crío. Recuerdas aquella entrada no se si tuya o de Toni (creo que de Toni) que hablaba sobre perder la memoria para volver a disfrutar con viejas glorias, pues eso...

      Respecto a Half-Life, no diré nunca, pero es más complicado que el caso Sonic, en este último al menos me gustan los plataformas.



      Eliminar
    3. No te gustan los FPS porque los asocias a un tipo de juego que repite con demasiada frecuencia los mismos esquemas desde hace muchos años, hasta el punto de que llega a hartar la misma fórmula una y otra vez.

      Half-Life es atípico dentro del género. No es un juego más de pegar tiros, de la misma forma que Portal no es un juego cualquiera de puzles, por ejemplo.

      Yo confío en que dentro de 20 años lo cogerás con ganas. xD

      Eliminar
  4. Recuerdo esa época que te viviaste a jugar juegos raros en la saturn XD

    Yo estoy como tú, muchos juegos por estrenar en steam, falta de tiempo y a veces falta de motivación, incluso teniendo un par de horas para jugar me encuentro apático y acabo jugando a algo sencillo de disparos o bien me tumbo al sofá a escuchar música.

    Lo positivo es que como tengo tanto para jugar no he sentido la necesidad de comprar la Wii U. Cada vez que pienso en comprarla me pongo a pensar el todo lo que tengo pendiente por jugar y descarto la compra.

    Solamente con la cantidad de juegos de NDS que no he llegado ni a probar creo que podría pasar unos cuantos años, ¿realmente necesitamos una nueva nextgen? si es por falta de juegos seguro que no.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Al tener tantos juegos tampoco tengo esa necesidad de ir corriendo a comprarme la nueva consola de turno. Hace años sí me sentía mucho más tentado a hacerlo.

      Eso no significa que no acabe comprando alguna porque nunca descarto nada, pero de momento me sigo encontrando con juegos divertidísimos entre lo que voy comprando de vez en cuando (y a precios de risa, además).

      Eliminar
  5. Si la captura de pantalla es de tu biblioteca de Steam, al menos coincidimos en 3 (los 2 freedom force y el Day of Defeat)... y es que las ofertas de steam son mu malas (yo tengo que añadir los 2 kotor...)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Sí, la captura es de mi biblioteca. Ahora mismo tengo 167 juegos en Steam, de los que unos 30 apenas he probado. Hay que sumar también los que tengo comprados en GOG, Desura y otras plataformas similares, junto con la gran cantidad de juegos en formato físico para PC y consolas antiguas que poseo. La verdad es que son muchos.

      Eliminar
  6. Ufff, yo soy estudiante de bachiller y me encuentro en el otro extremo de tu situación... con todo lo que eso conlleva como lo es el reducido numero de juegos que dispongo actualmente (aunque tiro de emulador de MAME, SNES y GBA XD)y que re-juego una vez cada cierto tiempo, pero esa etapa se me acabara en un rato.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Disfruta mientras puedas de tener pocos juegos pero más tiempo libre. En el futuro será al revés. ;)

      Cada época tiene sus ventajas pero también sus inconvenientes.

      Eliminar
  7. A mí me pasa que por desgracia mi lista de juegos va aumentado mucho más que los juegos que me voy pasando, pero es que a veces no me puedo controlar ante una buena oferta bien sea porque quiero premiar el trabajo de los desarrolladores o porque no sé si veré de nuevo esa promoción (Comportamiento consumista).

    La cosa es, que en mi caso me cuesta muchísimo empezar un juego nuevo ya que normalmente no lo dejo "aparcado" hasta que me lo he pasado almenos en dos ocasiones. (Por ejemplo, en Cave Story voy por la tercera partida porque no puedo evitar pensar que aún me quedan muchos detalles por descubrir y me animo a investigar todos sus entresijos)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Me parece que en la trampa consumista caemos casi todos, sobre todo con esos precios tan buenos de PC y la comodidad de las descargas digitales.

      Yo también vuelvo a revisar mis juegos preferidos una y otra vez, aunque tenga novedades por estrenar. De hecho incluso me pongo con los más antiguos de vez en cuando y eso que algunos me los sé de memoria.

      Eliminar