miércoles, 5 de octubre de 2011

An Untitled Story


Poco tiempo llevo con el blog y me doy cuenta de que he nombrado ya en un par de ocasiones a Matt Thorson. Este señor es conocido en el mundillo indie por su serie Jumper, una saga cuyo protagonista Ogmo aparece también en Super Meat Boy como personaje desbloqueable. Si entramos en su blog, veremos que tiene en su haber otros juegos, todos gratuitos y mayoritariamente del género de las plataformas.

Tal cantidad de juegos daría para escribir muchas páginas, pero mi intención con este artículo es hablar sobre el que considero su mejor creación: An Untitled Story. Cómo no, se trata de un juego gratuito de plataformas no lineal creado con la herramienta Game Maker, con una mezcla de acción y exploración de pantallas. Para que nos entendamos, entraría dentro de esa categoría que se ha dado en llamar metroidvania.

La aventura comienza en un nido y encarnamos a un huevo de algún tipo de pájaro, tal como suena. Lo primero que llama la atención es el estilo gráfico, con trazos gruesos y colores planos, casi infantil. Una sencilla melodía sirve de acompañamiento y lo único que podemos hacer es saltar de nuestro nido, sin saber muy bien qué dirección tomar. Que no nos lleve a engaño ese deliberado tono desenfadado, puesto que no se trata de un juego para niños. La realidad es que nos encontramos con un juego muy completo, largo y difícil, que pondrá en muchas ocasiones a prueba nuestra paciencia y destreza.

Como suele suceder en este tipo de juegos, al principio las acciones de nuestro personaje están muy limitadas, ya que solamente podremos movernos y dar un pequeño salto. Veremos sitios a los que no podremos acceder, lo que nos obligará a tomar otras rutas. A lo largo de la aventura iremos adquiriendo poderes y habilidades que nos permitirán avanzar hacia lugares donde antes no podíamos ir.

Aquí empieza la aventura.

Tenemos que recorrer un mapa extenso, dividido en zonas diferenciadas. En ciertas pantallas hay un extraño poste en el que podemos guardar nuestro progreso y recuperar la salud perdida; estos puntos de control también son artilugios de teletransporte, de manera que podemos desplazarnos automáticamente a cualquier otro lugar donde haya uno. En general hay pocos enemigos en el juego y nuestro mayor reto está en saltar y esquivar obstáculos, aunque en cada una de las zonas tendremos que enfrentarnos a un guardián, averiguando su patrón de movimientos y ataques para poder vencerlos. Al hacerlo, seremos recompensados con un corazón, que aumenta nuestro nivel de salud, o bien una mejora de nuestras habilidades.

Hay más formas de adquirir habilidades y corazones de salud. La mayoría se encuentran a la vista, en algún lugar más o menos accesible, aunque también muchas están escondidas en pantallas ocultas, que no son fáciles de encontrar. Otras las podremos comprar en ciertas tiendas, usando el dinero que aparece aleatoriamente al romper vasijas o destruyendo enemigos. El otro modo de obtenerlas será resolviendo los acertijos en forma de puzle que hay en algunos cofres que encontraremos, normalmente invisibles o camuflados en algunas pantallas.

Atravesaremos cuevas, desiertos e incluso el fondo marino.

Cualquier persona que tenga experiencia con títulos de este género, se dará cuenta enseguida de lo bien diseñadas que están las pantallas y lo bien planificado que está el mapa. Al principio nos encontramos con saltos y obstáculos sencillos, pero poco a poco nos vamos adentrando en lugares más complicados; esta evolución en la complejidad y variedad va al compás del crecimiento y cambio que va experimentando nuestro personaje, a lo largo de una historia en la que iremos conociendo otros personajes y lugares que forman parte de un mundo especial, que consigue ser homogéneo y no una simple sucesión de pantallas individuales.

La banda sonora es otra de las cosas de An Untitled Story que me maravilla. Hay más de cuarenta melodías distintas, compuestas en formato midi con el programa Guitar Pro 5. Hay composiciones sencillas, otras con un toque de misterio y algunas son de lo más extrañas, pero todas encajan perfectamente con el extraño mundo que vamos a explorar.

Si alguien ha probado la serie Jumper o cualquier otro juego de Matt Thorson, sabrá que son juegos difíciles. Este también lo es, sobre todo los enfrentamientos con los jefes de algunas fases, aunque al empezar podemos escoger entre cinco niveles de dificultad para todos los gustos y las partes más complicadas del juego no son esenciales para acabar la aventura.

El hielo resbaladizo es un escenario recurrente en los juegos de plataformas.

An Untitled Story es un juego sorprendente que me atrapó por completo. Es un juego gratuito, pero podría ser comercial perfectamente; si su autor le hubiera añadido un sistema de logros o trofeos, o quizá gráficos con mayor resolución y una buena publicidad, todo por un precio razonable (como hicieron los autores de Super Meat Boy, por ejemplo), podría haber sido un éxito de ventas.

El juego, que está solamente para Windows, lo puedes descargar haciendo clic aquí y la nota que le doy sin dudarlo es esta:

- 10 -

3 comentarios:

  1. Sin lugar a dudas parece un titulo sobresaliente, sin embargo mi alegría se esfumo con tu ultimo párrafo , una lastima, el que pueda y x ese precio (gratis) debería bajarlo rápido

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  2. Que indigencia mas hamorosa, Tuxlive si es por que usas alguna distribución de linux seguro que puedes emularlo con el wine.

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  3. @tuxlive: Como dice FastETC, seguramente lo puedas emular sin problemas con el Wine. En caso contrario, si algún día dispones de un equipo con Windows y te gustan los juegos del estilo Metroid, Maze of Galious, Symphony of the Night y similares, no lo dudes y juega An Untitled Story.

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